COMER Y BEBER EN MENDOZA
Nuestra corresponsal en Argentina, la sommelier Eleonora Jezzi Riglos, comparte con WiP sus mejores datos para disfrutar de la capital del vino argentino en 5 días, incluido el refugio de El Enemigo.
El viajar es un placer, y más si lo que nos convoca es una pasión. Esta nota está destinada a aquellos amantes del vino que están pensando en una «escapada» por las rutas mendocinas. Los días serán intensos pero muy disfrutables. Para ello escogimos aquellos «imperdibles» y algunos consejos útiles para optimizar nuestro tiempo.
Muchas personas planifican visitar Mendoza durante los meses de febrero y marzo, en plena época de Vendimia. La temporada es hermosa y calurosa, pero para quienes gustan de conocer un poco más profundamente proyectos y personajes, la época de cosecha no es la más adecuada. Porque para bodegueros y enólogos será prácticamente imposible destinarnos algo de su tiempo. Además, entrado el otoño está la ventaja de que las temperaturas son más benévolas y algunos costos más bajos, por eso elegimos abril para emprender la ida.
PDTA: Les recomendamos siempre contactar previamente a las bodegas pequeñas sobretodo, ya que muchas de ellas no cuentan con estructuras de recepción al turismo todos los días, pero son las más jugosas para visitar.
BODEGAS IMPERDIBLES CERCA DE LA CIUDAD DE MENDOZA
Benegas Lynch: Una de las más antiguas de la zona, para empaparse de la historia de la región y degustar algunos de sus icónicos vinos como un añoso Sangiovese o su gran Meritage.
Dirección: Aráoz 1600 (Ruta Prov. 60) Teléfono: +54 261 4960794 / 4963078
De Ángeles: Una viña de 1924 atendida por su dueño y su enólogo. Hermoso paisaje y un proyecto encantador de pies a cabeza. Pasar una mañana junto a Guillermo Barbier y Juan Manuel González es una experiencia que enriquece el saber y sobre todo el alma.
Dirección: Roque Sáenz Peña 1635 Teléfono: +54 261 15-668-7686
Carmelo Patti: Uno de los popes de la enología argentina nos abrirá la puerta para dejarnos conocer su maravilloso mundo. El mago del Cabernet Sauvignon nos atenderá en persona. La visita se puede realizar con almuerzo maridado. Dirección: Calle San Martin 2614 Teléfono: +54 261 498-1379
Casa El Enemigo: El santuario del gran Alejandro Vigil (enólogo en jefe de Catena Zapata) y su familia. La nueva ola en lo que a turismo del vino se refiere. Aire bienvenido, atmósfera relajada en un permanente culto a Baco. La presencia de Vigil es un condimento excepcional, contagiando pasión a cada paso. En la República de Chachingo se puede almorzar o cenar por pasos y se ofrecen 3 opciones de «flight» para degustar los famosos Enemigos, ascendiendo en nivel y por supuesto en costo. Si quisieran acotar el presupuesto, los viernes hay música en vivo, hamburguesas y una copa de vino a precios accesibles. Dirección: Videla Aranda 7008, 5519 Teléfono:+54 0261 413-9178
COMER DE MANTEL LARGO
Si nuestro plan es regalarse al menos una cena importante, tanto Bodega Zuccardi en «Casa el Visitante» (Ruta Provincial 33, KM 7,5, Fray Luis Beltran, 5531 Maipu, +54 0261 441-0000) y Bodega Séptima (Ruta Internacional Nº 7 Km. 6,5, Agrelo) ofrecen opciones de lujo en alta gastronomía. Con más bajo presupuesto Bodega Zuccardi ofrece menú austero en su otro restaurante «Pan y Oliva», de cara a los olivares que tan bien cuida Miguel Zuccardi. Un pequeño restaurant, almacén y hasta centro educativo.
Las distancias en Cuyo son relativamente cortas, por lo cual también es placentero visitar y recorrer la ciudad tal vez antes o después de un día en las bodegas. Los imperdibles:
Museo del Área Fundacional
Plaza España
Mercado Central
Parque General San Martín
Cerro de la Gloria
LOS ELEGIDOS PARA COMER EN LA CIUDAD DE MENDOZA
Zampa: La nueva jugada de Pablo del Río («Fuente & Fonda») en clima «bar de tapas». Esta es una propuesta fresca, bienvenida en la ciudad; ofrece buena carta de cócteles y una escueta pero buena carta de vinos. Lindo final de día.
María Antonieta: Es un bistro que se centra en la calidad de sus productos. Recomendamos el almuerzo. Su brunch –dice la editora de WiP- también es imperdible.
Azafrán: Cocina local de muy buen nivel, con la cava de vinos como protagonista.
EN EL VALLE DE MODA
Valle de Uco: Sin duda alguna donde más provecho sacarán si van en auto. Al ser mayores las distancias deben optimizar el tiempo. Proponemos tres días de visitas enriquecedora. Sin duda la revolución del vino argentino se gesta en el Valle, con propuestas novedosas tanto en lo enológico como en lo gastronómico. En este punto es importantísimo aprovisionarse de víveres para las noches si es que decidimos no cenar a todo lujo, porque la mayoría de los restaurantes modestos abren solamente al mediodía.
Dentro del Valle de Uco, lo mejor de Tupungato:
The Vines of Mendoza: El ambicioso sueño del emprendedor estadounidense Michael Evans donde inversores particulares de todo el mundo compran hectáreas, plantan, producen vino y uva de la mano de grandes enólogos. Digno de visitar, y cerrar el día con un cóctel en los jardines de cara a la montaña o darse el gusto de comer en el afamado Siete Fuegos de Francis Mallman. Dirección. Ruta Provincial 94, M5663AHA Teléfono: +54 0261 461-3800
SuperUco: El sueño dorado de los hermanos Michellini, está casi dentro de los terrenos de The Vines. Este es el templo donde juntos realizan sus hazañas, crían a sus niños y tuercen los destinos del vino argentino. Indispensable visitarlos. El almuerzo y recorrida a su Bodega La Azul es un «must».
Hacia el otro lado del camino, Bodega Salentein y su imponente Museo Kilka también merecen una visita.
Para un mediodía sin bodegas el paseo del Manzano Histórico es una gran opción, se puede almorzar y hasta disfrutar un picnic cerca del arroyo que bordea el ascenso. Una hermosa vista de la región.
Don Ilo y Tupungato DiVino son dos opciones para el almuerzo que merecen la visita. El primero por su especialidad en pesca y el segundo por siempre tener perlas vínicas de Tupungato para probar y llevar. No es raro encontrarse con enólogos en la mesa vecina.
En el camino hacia Vistaflores, Tunuyán (donde deben visitar Clos de los Siete, el emprendimiento de Michel Rolland y sus socios franceses) se encontrarán con Finca Blousson, AlPasión y Gimenez Riili. Las dos últimas cuentan además con muy buenas opciones gastronómicas. También se puede almorzar rico en La Posada del Jamón otra de las encantadoras opciones de la zona.
Un cierre de lujo en la región es visitar Piedra Infinita, declarada mejor bodega del año por su arquitectura. La familia Zuccardi construyó este templo en Altamira únicamente con materiales lugareños. Sebastián Zuccardi elabora enteramente allí sus vinos. La propuesta gastronómica aquí es ambiciosa pero bien vale la pena y hasta se puede armonizar con sus tan reputados vinos.
Si el tiempo les acompaña también pueden recorrer Altocedro, la Bodega del hijo de libaneses Karim Mussi, con quien vale la pena pasar una tarde entre vinos y anécdotas. Prometo que se llevarán en el alma lo mejor de la zona de La Consulta.
Clos de los 7: Dirección: Clodomiro Silva S/N 0261 Teléfono: +54 0261 668-7680
Piedra Infinita: reservas@piedrainfinita.com
Altocedro: Teléfono: +54 02622 47-0717
LA LOGíSTICA PARA LLEGAR
La mejor opción es tomar un avión hacia Mendoza, el renovado aeropuerto ya está operativo y fabuloso. Las tarifas rondan los U$190 tanto desde Buenos Aires como Santiago de Chile. En Bus el viaje es de 12 horas desde la ciudad porteña y 7:30 desde Santiago, rondando el precio de U$100 ida y vuelta. Lo mejor, sin embargo desde Chile es ir en auto propio, aunque las filas en aduana pueden ser más largas de lo normal por estos días, ya que Chile se ha convertido en destino de compras para los argentinos. Alquilar un vehículo si van en avión será la mejor opción. Si la escapada a Mendoza es un plan de amigos o dos parejas mejor aún; las tarifas diarias de alquiler son de U$65 para un auto sedán promedio.
Artículos anteriores de Eleonora:
Erase una vez Argentina, 09 noviembre 2016
Todos estos años de gente, 08 diciembre 2016
Los tres mosqueteros del vino argentino, enero – febrero 2016
(*) Eleonora Jezzi Riglos es sommelier y ha trabajado en el servicio y comercialización en restaurantes, vinotecas y bodegas. Actualmente es dueña de Pain et Vin, un imperdible bar de Vinos y Panadería de masas madre de Palermo, en Buenos Aires. Eleonora fue primero profesora de Educación Física por lo que se auto define como una docente de por vida.
Un comentario
victoria dijo:
Mendoza Vinos