PATACHE DE PINOT NOIR

Publicado el 24 febrero 2017 Por Mariana Martínez @mymentrecopas

Degustamos Pinot Noir de Borgoña y de Chile, y aunque como siempre tuvimos esas odiosas comparaciones hay elegidos para casi todos los bolsillos.

Esta semana tuvimos una cata muy entretenida en torno al Pinot Noir, invitados por Edwards Fine Wines,  importador de una variada selección de vinos europeos (y que vende directo). El centro de la degustación fueron los de Borgoña, por supuesto, siendo los grandes referentes en el mundo, y junto a ellos varios chilenos que pensamos podían ser interesantes.

Con los chilenos, pienso, no tuvimos mucha suerte. Probamos Casa Marín Lo Abarca Hills 2004 de San Antonio (aporte del sommelier del restaurante Boragó, de quien pronto les contaremos más). Este 2004, es un vino que tiene en carta Dragan para un plato en el cual los hongos sus protagonistas, debido a suave y cremosa  textura. Para mí en este Pinot hoy predomina ya la ciruela seca en nariz y boca, aunque ha logrado sin duda la suavidad y armonía que no tenía en su juventud. Mi gran apuesta, Tabalí Talinay 2014 del Limarí, lamentablemente se mostró sucio en nariz, con tal vez algo de corcho y marcadas notas de whisky (whisky-lactona), desequilibrado finalmente en boca. Una mala botella.

pinot_maxreservaLos mejores chilenos, bien parados cada uno en sus categorías de precio fueron el Pinot Errázuriz Max Reserva 2013 de Aconcagua Costa (con evidente evolución en color pero aun con muy rica fruta roja y acidez), así como Cono Sur Ocio 2013 de Casablanca (muy bien parado en color y fruta negra, aunque con mucho humo en nariz).

Comparar siempre es odioso a fin de cuentas, pero también nos muestra hacia dónde queremos ir, y por qué no deberíamos seguir subiendo en precios, sin tener la calidad. Lo digo por Pizarras de Errázuriz, y Espalderas de Miguel Torres, entre otros que han pasado la barrera de los $100.000, o van hacia allá.

La selección de Diego, está bien pensada, porque muestra la admirada suavidad y fuerza que pueden entregar los Pinot Noir de Borgoña, con apelaciones no tan codiciadas, sin superar la barrera de los $50.000.

El hallazgo de la degustación entre franceses, fue la mezcla de Pinot y Gamay, La Superbe 2014, de una apelación regional (de menor prestigio y precios más económicos) llamada Coteaupinot_lasuperbex Bourguinon, y que en Chile vale $12.000. Es interesante sentir en este vino tinto el dulzor de la tinta Gamay (léace Gamé) y su carácter más rústico. La mezcla con su prima genética más sofisticada la Pinot Noir le acerca en parecido a nuestros primeros tintos de Cinsault.

El otro favorito de la degustación fue el Pinot de Fixin ($30.000), pequeña  y menos prestigiosa apelación de la Côte de Nuits que suele entregar vinos más ligeros y menos aromáticos que sus afamados vecinos de la gran villa Gevrey –Chambertin. Y el vino es justamente eso, austeridad en nariz y  liviandad en boca, una mezcla que puede sonar aburrida, pero que  sin defectos y fruta roja de rica vivaz detrás, junto con justa presencia precisa de taninos, es el  gran reto a conseguir.

pinot_fixinMás arriba quedó el Pinot 2012 apelación Nuits Saint George 2012, de Domaine Henri Gouges ($45.000) con una sutil nota ahumada en nariz, y el característico color rubí ligero. Liviano en boca, con notas terrosas, más complejo y más intenso, joven aún.

Cerramos con el 1er Cru Les Perrieres de la apelación Beaune, año 2010 ($45.000). Frutal y floral en nariz, suavemente  y ligero delicado en su paso por la boca, incluso licoroso, de muy rica acidez final. Listo para beber y dejarse llevar.

Comparar nos dejó una vez más esa ingrata sensación de poder llegar, aunque yo tengo fe de que sí pinot_apaltaguapodremos hacer grandes Pinot una vez encontrado el lugar y a prueba de ensayo y error –  los comencemos a entender, porque no queda más.

Mientras eso pasa, me quedo un Pinot sin pretensiones que descorché la semana pasada en casa junto a los más especiados curries de Maprao Thai, y que resultó por contraste un maridaje perfecto. Se trata del Apaltagua Pinot Nior 2013, de un viñedo ubicado a sólo 12 km del Océano en la DO San Antonio. Su color es violeta, mucho más intenso que los de los clásicos de Borgoña. Con notas a frutos negros, nota sutil de humo y especias dulces que se repiten en una boca que es de cuerpo medio y taninos suaves. Un Pinot muy sabroso y con justa acidez final que lo refresca. Listo para beber y disfrutar sin comparar (vale $14.900 en www.clubapaltagua).

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