Más fruta y menos chocolate es la promesa cumplida de este nuevo vino que nace a los pies de la Cordillera de los Andes con el fin de romper un largo  hechizo.

No lo dijimos nosotros, lo dijo Andrés Sanhueza, el enólogo y nuevo gerente general de Viña Santa Ema. Su nuevo Merlot Amplus es la antítesis de su éxito de ventas, el Gran Reserva Merlot. Y así tal cual fue concebido. Eso quiere decir una sola gran cosa: menos madera y más fruta. Aunque en realidad, para esta viña que este año cumplió 60 años de historia, este nuevo Merlot es mucho más que eso. Y así lo demostraron al producir su lanzamiento literalmente lleno de magia, esta semana en tienda Verónica Blackburn.

Varios son los vinos que componían la línea Amplus de Viña Santa Ema hasta ahora. La línea premium que ronda los $15.000,  tiene cada vino fiel a la tipicidad de su cepa. Había un Sauvignon Blanc y Chardonnay de Leyda, un Cabernet Sauvignon del Maipo, un Carmenère de Cachapoal y un Carignan del Maule. El Merlot se hizo esperar.

El Merlot es la cepa lejos que más vende Santa Ema, y su Gran Reserva Merlot es un caso de estudio. Un imperdible para quienes no gustan equivocarse al pedir una botella de vino tinto en restaurantes. Y por lo mismo, hay que decirlo, es el vino de la discordia para todos quienes buscamos probar cosas nuevas alejadas del confort del dulzor de la madera. Era fácil quedarse dormido en los laureles. Cierto. Pero también un reto romper con ese estigma. Andrés Sanhueza se lo propuso hace años,  incluso quiso tener un vino de calidad muy superior con esta cepa que es su emblema.

El nuevo Amplus Merlot 2016 de Santa Ema  proviene del  campo Cerro Blanco, plantado por la familia Pavone en Pirque el año 2009. Es sí, un campo joven, de más de 200 hectáreas en los faldeos de la cordillera de los Andes,  con un promedio de 1.000 msnm; donde plantaron principalmente cepas tintas. Cabernet Sauvgjnon por supuesto, Carmenère, Syrah, Carignan (para las próximas generaciones dice entre risas Sanhueza); ademas de  la cepa blanca Marselan y por puesto Merlot.   

Para hacer el nuevo Amplus Merlot utilizan uvas de viñedos en  laderas  y  las zonas más bajas, las que se vinifican en fudres de madera austríaca de 5.000 litros y sin tostar. Para no darle ni un solo toque de caramelo, vainilla o chocolate al vino, y así destacar y respetar su fruta. Una fruta roja que es una delicia.

Hacía tempo que no probábamos un Merlot tan delicado; tan jugoso y rico, elegante y fresco a la vez. Un bebé aún, ciertamente,  del 2016. La pregunta que de seguro se harán los seguidores del Gran Reserva ($7.900) es: por qué pagar más si aquí hay menos fuerza en boca, menos concentración… menos madera.  A lo que yo les diría: sí, pero  hay mucha más fruta, con más elegancia; mucho más uvas y  menos chocolate.

Si quieren atreverse a probarlo pagando menos, dense una vuelta por la bodega de Isla de Maipo, su tienda es un lujo a precios de outlet. Allí pueden encontrar todos los Amplus casi a la mitad de precio; igual que Catalina (la mezcla con etiqueta de tela).

MÁS ALLA DEL MERLOT

El nuevo viñedo de Santa Ema en Maipo Andes, será parte de la nueva Ruta del vino de Pirque. Sanhueza, empoderado con su nuevo rol de gerente general (además de enólogo) cuenta que habrá senderos y zonas de picnic, para poder disfrutar la belleza del entorno precordillerano.  Cuenta ademas que el lugar es punto de partida para trekkings de varias horas hacia la cima del famoso Cerro Blanco.