Compramos todos los espumantes que encontramos en el supermercado bajo los $5.000 en busca del mejor relación precio calidad. Aquí están nuestros ganadores, elegidos a ciegas por supuesto.

Que el consumo de espumantes en Chile durante todo el año esté subiendo como la espuma ya es un hecho, sólo hay que salir a darse una vuelta por restaurantes para ver cómo al fin parece que la hegemonía del pisco sour está en retirada. Aun así, fin de año sigue siendo su momento. Pensando en ello y en que ojalá no terminen en otro lado que no sean nuestras copas o junto a helados de piña, compramos todos los que encontramos en un mismo supermercado por debajo de los $5.000, aprovechando incluso las ofertas de temporada. La verdad, pensamos que la tarea iba a hacer mucho más dura, con mayores defectos como solía ocurrir años atrás. Pero no lo fue. Lo que nos habla de que en esta categoría de precios, el método Charmat (el que consigue la segunda fermentación en grandes estanques de acero inoxidable, aunque no se especifica en la etiqueta) está dando excelentes resultados. Mientras, y lo más importante, las uvas con que se elaboran ya no son lo que sobró. Dejamos fuera los que nos parecieron demasiado empalagosos para ser Brut o sin frescura en su fruta.

Para tener un panorama completo, incluimos espumantes franceses, porque aunque parezca mentira, a diferencia de los argentinos, sí entraron en esta misma categoría de precios. Dividimos los 14 vinos en dos categorías, Brut (con menos de 15 gramos por litro de azúcar residual) y Demisec (con más de 33). Olvídense de ver Nature (menos de 3g/l) o detalles de variedades con qué fueron elaborados por estos lados. Servir bien heladitos, entre 6 y 8°C.

LOS MEJORES BRUT:

El mejor precio/calidad. Valdivieso Brut ($3.990): Lo primero que llama la atención de este correcto espumante chileno, es que con su presentación mucho más sencilla y clásica, destacó por sobre la nueva línea Limited de Valdivieso, de presentación más lujosa y moderna ($4.900). Hay aquí más sabor, tal vez también más azúcar, pero definitivamente más fruta y una burbuja menos agresiva para refrescar y hacer cosquillas en el paladar. Nos hace salivar. De acidez justa, su gran gracia está en lo jugoso que es y fácil de beber. Acompañar con bocados de carnes blancas, como pavo, pollo y pescados cocidos al horno.

El mejor francés y el mejor de todos.  Louis Perdrier Brut Extreme Reserva del Fundador ($4.990): Si quieren sorprender con un francés, pero no engañar diciendo que es un Champaña, este espumante es una genial opción. En la degustación a ciegas su acidez filosa en boca ya decía que debía ser de un clima muy frío. Destacó además en nariz por una nota sutil a miel que no empalaga, en perfecto contraste con su rica acidez. Si bien el dulzor está ahí, su burbuja es chispeante y su sabor bien cítrico. Como lo dice su contraetiqueta, este es un Mousseaux, es decir un espumante francés fuera de Champaña con método charmat o tradicional (no se aclara, pero el precio habla). Su origen es la Côte d’Or, Borgoña, cuna de grandes Chardonnay y Pinot Noir. Perfecto será para dar la bienvenida a los invitados, y compartir junto con bocados ligeros y frescos que provengan del mar.

El mejor chileno. Baron La Croix Brut Brut ($4.790): Es poca, por no decir nada, la información que nos da su etiqueta frontal (contraetiqueta ni siquiera hay). Lo único que nos dice es que lo produce TIB en Chile. la cosa es que se destacó entre los tres mejores desde su nariz, por sus aromas cítricos, con notas a pomelo y mandarinas, algo muy raro de encontrar en espumantes de Chardonnay y Pinot Noir por lo menos. Ya en boca, su acidez está en perfecto equilibrio con sus sabores cítricos. Otro espumante sencillo para recibir bien heladito a nuestros invitados, y acompañar todo lo que lleve muchas gotas de limón. ¿Alguien dijo ceviche?

Valdivieso Limited Rosé Brut ($4.990): Es “el Rosado” que pasó nuestra la prueba de la frescura. Su color es rosa pálido, muy atractivo. En nariz austero, con suaves notas de frutos rojos, lo que a veces se prefiere especialmente ante las notas de frutas muy maduras de su contraparte el Rosé Brut Clásico). Igualmente austera es su boca, aunque con ricas notas a guinda ácida. Otro espumante sabroso para acompañar platos frescos o carnes rojas frías.

LOS MEJORES DEMI SEC:

Viña Mar Demisec ($4.190): Preferimos esta versión dulce, por sobre la Brut, porque si bien ambas resultan empalagosas, la Demisec sí tiene permiso para serlo y logra refrescar el final de boca con su burbuja bien activa. También fue el menos dulce de todos los Demisec que probamos, y el más equilibrado. Su dulzor medido, junto con una acidez justa, invita a beberlo con las frutas del final de la comida, o a compartirlo junto a las uvas de media noche.

Celebrité Demisec ($4.790): Este espumante francés (otro Mousseaux) superó a su propia versión Brut, la que perdió su encantó ya en nariz con sus notas a dulce de leche. La clara intención de este Celebrité es ser dulce como la miel, lo que logra sin problema. Hay que reconocerle su gracia, y es que siendo  muy dulce tiene fruta fresca detrás. Servir de postre, junto a tartaletas de frutas o bueno, ok, con frutillas con chocolate. En comparación, la versión Moscato de Baron La Croix resultó demasiado plano y por lo tanto irremediablemente empalagoso.

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