Los vuelos 3 y 4 de la 4ta edición #Chile, tuvieron como protagonistas a la cepa tinta con la que más cómodos nos sentimos en Chile. Aquí el detalle de este viaje de lujo.

Conoce aquí los dos vuelos iniciales de lo que fue Premium Tasting Chile 2019. Y, sin más preámbulos, sigamos el viaje a través de 40 grandes vinos de Chile.

3er VUELO.  CABERNET SAUVIGNON MÁS ALLÁ DEL MAIPO

• Pérez Cruz Pircas Cabernet Sauvignon 2015, Maipo / $30.000 (enólogo Germán Lyon)
• Montes Alpha Special Cuvée Cabernet Sauvignon 2015, Marchigüe / $25.000 (enólogo Aurelio Montes del Campo)
• 7 Colores Icon Alto Maipo Cabernet Sauvignon 2013, Maipo / $32.990 (enólogo Diego Swinburn, presentó el enólogo Rodrigo Moletto)
• Miguel Torres Manso de Velasco Cabernet Sauvignon 2013, Curicó / $60.000  (enólogo Fernando Almeda, presentó el actual enólogo de la viña Eduardo Jordán)
• Gandolini Las 3 Marías Cabernet Sauvignon 2013, Maipo / $95.300 (enólogo Stefano Gandolini, presentó el sommelier Alan Grudsky)

Así es, vaya selección de Cabernet. Jamás pensada a esta altura de la degustación; sabiendo que la cata siempre va in crescendo y que apenas íbamos por menos de la mitad de los 40 vinos por catar. Si es que aún no se impresionan, vamos por el 4to vuelo. A fin de cuentas, todos son con base Cabernet, y así aprovechamos de comentarlos todos juntos.

4to VUELO. CABERNET SAUVIGNON Y ALGO MÁS…

• Tabalí Transversal Reserva Especial 2016, Maipo/Limarí / $21.900 (enólogo Felipe Müller)
• Dagaz Tierras de Pumanque 2017, Colchagua /$29.000 (enólogo y socio Marco Puyo)
• Andes Plateau Blend 700 2016 / $17.900 (enólogo y socio Felipe Uribe)
• Bouchon Family Wines Mingre 2015 / $29.000 (enólogo Christián Sepúlveda, presentó Juan Bouchon)
• Errázuriz Don Maximiano 2016, Aconcagua / $99.990 (enólogo Francisco Baettig, presenta el enólogo Pedro Contreras)

¿Un lujo no? Vaya precios, ¿cómo llegamos a esto? Y eso que seguimos siendo gran precio/calidad, a nivel internacional y, no, no es broma… Quizás, justamente, tal vez por ser los vinos más livianos de cada vuelo, y los más económicos, lo cierto es que mis favoritos en estas dos series de cabs, siempre fueron los primeros. Para beber hoy:  el Cabernet más top de Pérez Cruz, en su añada 2017; no pudo dejar de recordarme al Cot (Malbec) de la misma viña y de la misma añada. Como cortados por la misma tijera, y claro: mismo enólogo, mismo viñedo, misma filosofía después de casi una década haciendo vinos al pie de los Andes. Ambos (Cot y Cab 2017) son elegancia, elegancia, elegancia. Guayaba, curiosamente, es la misma nota que encontré en la versión de Pircas 2010 descorchada recién la semana pasada. Sin embargo, en boca el 2017 tiene un perfil completamente diferente: gran suavidad de taninos, mucha fruta roja, y mucho más frescura. Un Cab moderno, jugoso como el solo. Favorito del 3er vuelo para beber hoy, los demás por sobre los $30.000 guarde, guarde, guarde, aún tienen mucho que dar; incluso los 2013.

Mi favorito del 4to vuelo fue Tabalí Transversal Reserva Especial 2016, un tinto bien particular. 50% Cabernet del Maipo – 50% Limarí (entre Syrah, Malbec y Cabernet Franc). Otro grande, de taninos muy suaves, listo para beber hoy, lleno de fruta negra y de divina acidez.

De un perfil diferente, es mi siguiente favorito del grupo para beber hoy: el Cabernet Montes Alpha Special Cuvée 2017. Especial por su etiqueta negra, no blanca como todos los demás Montes Alpha. Especial además por el pichintún en su mezcla de Syrah y de Carmenère; todas sus uvas, por cierto, son de Marchigüe (Colchagua). Su cuerpo medio, lleno de frutas negras, tan suave y pesado a la vez, resulta cremoso en su paso por la boca, mientras, en nariz tiene una gran complejidad: allí hay algo herbal, algo animal, algo volátil y muchas notas a frutos negros. Mucho de todo en su justa medida.

Curioso encontrarse en este selecto vuelo 3, al autodenominado Ícono de la Viña 7 Colores; curiosa su presentación como parte del Grupo Lourdes (productores de vinos a granel) y por ello, curioso, su precio ($32.900). Curioso que ante todo este precedente, el vino no destiñó entre el grupo. Con sus cinco años a cuestas, con su origen en un viejo viñedo de Cab en Linderos, mostró mucha fruta negra, gran estructura, un marcado carácter herbal y muy rica acidez final. También, un 2013 para seguir guardando.

El más particular del 4to vuelo fue Andes Plateau 700, por sus notas herbales y mentoladas, con guiños a eucalipto, junto a una boca liviana muy muy fresca. Muy en su estilo, aunque con mucha más fruta negra del secano costero, se acercaron también las sabrosas mezclas Mingre de Bouchon Family Wines y Tierras de Pumanque de Dagaz.

¿Acaso no diré nada de los grandes que superan los $60.000? ¿Qué decir de ellos? Son fuerza, estructura, potencia. Increíble como los 2013, Manso y 3 Marías, siguen tan firmes como si el tiempo no pasara por ellos. Y, el gran clásico Don Maximiano, con 30 cosechas a cuestas? Sin duda, seguirá ese camino, pero habiendo nacido después (2016) y bajo la influencia de un estilo que ahora busca suavidad, de seguro llegará a ser mucho más elegante en sus taninos, mucho antes que sus pares.

Aquí seguimos con más, la segunda mitad de Premium Tasting #Chile 2019… se imaginarán que a esta altura para poder disfrutar de estos vinazos, una persona normal ya no quiere más. Pero nada de quejarse, menos vinos, ya nos dijeron, en el futuro no habrá.